Historia de san Juan del monte
Las fiestas de San Juan del Monte se celebran en la ciudad de Miranda de Ebro, provincia de Burgos (España) el lunes de Pentecostés y el fin de semana que le precede. Su origen se remonta a la Edad Media y es la romería más antigua e importante del norte español. En 1975 fueron declaradas Fiestas de Interés Turístico Nacional, rango que se perdió años posteriores por temas administrativos, razón por la que desde 2008 se viene tramitando conseguir de nuevo dicha declaración. Desde 1996 ostenta el título de Fiesta de Interés Turístico de Castilla y León por parte del gobierno regional1
Los festejos son organizados por la Cofradía de San Juan del Monte, en colaboración con el Ayuntamiento de Miranda de Ebro. Aunque hay actos durante más jornadas, es durante los tres días centrales cuando la ciudad se ve invadida por el bullicio y la alegría de las charangas y cuadrillas, que recorren las calles de la ciudad y el monte durante la romería, ataviadas cada una con sus respectivos uniformes. Constituyen una verdadera explosión de júbilo, que impregna el sentimiento de los mirandeses más allá de las propias fiestas, estando presente en rincones o actos de la ciudad durante el resto del año.
Conflictos político-religiosos y práctica desaparición de la romería. Siglos XVII-XIX
La historia de la romería siempre ha estado marcada por los pleitos tantos religiosos como civiles. Tal fue la magnitud de las disputas que en 1620 hubo un motín contra el mismísimo Corregidor, don Esteban de Carvajal, que a punto estuvo de eliminar la romería. El momento de mayor tensión llegó en 1646, cuando el obispo de Calahorra, Don Juan Piñero Osorio, culpó a los romeros de inmorales por beber y comer durante el trayecto a la ermita. Fue entonces cuando el prelado decidió trasladar el peregrinaje hasta la iglesia de Santa Marina de Bardauri y así acortar el camino. Otra de las decisiones fue separar a los hombres de las mujeres en dos hileras, debiendo ir rezando y sin hablar. Esta sentencia se mantuvo firme hasta el año 1794. Juan Antonio de los Tucros, arzobispo de Burgos, prohibió la fiesta en 1794 y mandó destruir la ermita y trasladar la imagen del santo a un lugar más oportuno. Tras el desmantelamiento de la ermita, algunos grupos de mirandeses continuaron la tradición romera en aquel paraje, seguramente en la gruta que hoy acoge la ermita del Santo. La ubicación del primitivo templo quedó en el olvido y en época reciente se discuten las distintas posibilidades sobre su localización.
Durante el siglo XIX, apenas se tiene documentación sobre la romería, aunque hubo un cierto resurgimiento a mediados de dicha centuria.
Creación de la Cofradía y resurgimiento de la fiesta. Siglo XX[editar]
Ya a principios del siglo XX (1917)3 se crea la Cofradía de San Juan del Monte, que tratará de revitalizar la fiesta. El primer programa oficial de fiestas se redacta en 1920 y uno de los principales actos es el Concurso de Carrozas y Carros Engalanados que años más tarde cambiaría de fecha para celebrarse en las Fiestas Patronales de septiembre. A partir de entonces se sucede el desarrollo que conduce a las fiestas que conocemos hoy en día.
En 1963 un acontecimiento hizo que las fiestas se ganasen la admiración y respeto del clero, reticente hasta entonces de estos festejos. Durante la Bajada de Romeros, provenientes de la romería en el monte, se anunció el fallecimiento del PapaJuan XXIII, momento en el que cesó la música de las charangas, recogieron las pancartas de las respectivas cuadrillas y bajaron en absoluto silencio hasta la ciudad en señal de duelo.
En el año 1974, las cuadrillas sanjuaneras fueron invitadas a participar en las fiestas de Burgos. Un tren partió de Miranda el 29 de junio con 1.500 blusas, mil niños sanjuaneros y más de 300 músicos. La entrada en la ciudad de Burgos causó asombro y una alegría hasta entonces desconocida en la ciudad. Grupos de majorettes, de danzas, Bandas de Música y Fanfarrias, dieron escolta al ejército sanjuanero hasta la misma catedral, donde fueron recibidos oficialmente por el Ayuntamiento y autoridades. Desde entonces existe una cuadrilla sanjuanera en la capital que viaja todos los años a Miranda para disfrutar de la romería.
El 19 de junio de 1975, el Ministerio de Información y Turismo elevó el rango de la romería a Fiestas de Interés Turístico Nacional. En 1979, el Estado envió documentación a la Cofradía para renovar dicho rango, pero ésta, por olvido o falta de interés, no llevó a cabo los trámites necesarios. En 1996 la Junta de Castilla y León incluyó la romería entre las Fiestas de Interés Turístico de la región y desde 2008 se tramita la recuperaración de la declaración a nivel nacional, como la que ya tuvo en la década de los años 1970.